La política arancelaria del expresidente Donald Trump ha desencadenado una serie de consecuencias económicas, incluyendo el aumento de precios y la escasez de productos en diversos sectores.

La implementación de aranceles por parte de Donald Trump ha generado un efecto dominó en la economía global. Según expertos en comercio internacional, estas medidas han alterado las cadenas de suministro, provocando un incremento en los costos de producción y, en última instancia, en los precios al consumidor.
El sector tecnológico es uno de los más afectados, por ejemplo: el ¡Phone y la Nintendo Switch 2, ya que dependen de componentes fabricados en Asia y sus precios subieron debido a los aranceles.
Otro ejemplo es la empresa reconocido de Apple, enfrenta desafíos significativos, porque la mayoría de sus productos se ensamblan en China y la imposición de estos aranceles podría duplicar los precios de sus dispositivos.
Asimismo, el mercado de alimentos y bebidas importadas ha sufrido las consecuencias, sus productos europeos como quesos y vinos han experimentado aumentos de precios y una reducción en la oferta disponible.

Los consumidores estadounidenses, ante estos incrementos, tienden a buscar alternativas locales o más económicas, lo que afecta directamente a los importadores y productores europeos.
Las políticas arancelarias de Trump han tenido un impacto profundo en la economía global, generando aumentos de precios y escasez de productos. La incertidumbre y las tensiones comerciales continúan, obligando a consumidores y productores a adaptarse a esta nueva realidad económica.